Desde la alocución del Presidente de Colombia, Iván Duque, en la noche de este viernes a nivel nacional en el que declaraba aislamiento preventivo obligatorio en todo el territorio. En Santa Marta no había pasado ni una hora de haberse confirmado los primeros dos casos de Covid-19, los cuales correspondían a un adulto mayor de 88 años, que se encuentra en delicado estado de salud y que hasta el momento se desconoce cómo lo contrajo, y de un joven de 20-30 años que al parecer había llegado de España pero no presentó síntomas al llegar a la ciudad.
Ante esta noticia el miedo empezó a crecer en las familias, por lo que desde muy temprano llegaron a los diferentes supermercados de varios sectores para realizar sus compras. Sin embargo, como era de esperarse, las extensas filas para ingresar fueron notables, las estaciones de gasolina no daban abasto con la cantidad de vehículos que buscaban abastecerse ante cualquier situación de peligro. Igualmente, los trancones en las principales vías no se hicieron esperar.
El panorama en la capital del Magdalena es preocupante, por la aglomeración de las personas que salen a las calles sin los respetivos protocolos de higiene que se deben tener en cuenta para prevenir contagios del Covid-19. Estas situaciones han puesto en alerta al Gobierno Departamental y Distrital, que a través de videos publicados en sus redes sociales pidieron calma y serenidad a la ciudadanía, puesto que, los supermercados podrían ser epicentros de la enfermedad. Por lo que decidieron anticipar el toque de queda para las 2:00 de la tarde de este sábado, que se conectaría con el que inició el Gobierno Nacional programado para el martes 24 de marzo a las 11:59 de la noche.
Sin embargo, el miedo de las familias samarias no es solo por la posible escasez de alimentos, sino por el agua. Son muchos los barrios de la ciudad que carecen de este preciado líquido, algunas personas temen no tener los recursos para comprar sus carro-tanques de agua, para abastecerse ante la cuarentena anunciada por el Presidente de la República Iván Duque; y aunque la empresa de servicios públicos, ESSMAR, desarrolló un plan de contingencia para los más de 160 barrios que no tienen agua en la ciudad, han sido muy pocos los que se han beneficiado porque la propagación de la enfermedad no da tiempo. Ahora solo queda esperar la cooperación de los ciudadanos para evitar más casos de contagiados en Santa Marta, una ciudad que no cuenta con un sistema de salud idóneo para una pandemia.
Hasta el momento, se siguen viendo familias haciendo filas para comprar. El Sistema Estratégico de Transporte de Santa Marta, conjunto al Sistema de Transporte Unificado no han dado a conocer las acciones tomadas para este fin de semana y cuarentena nacional con relación a la movilidad de centenares de trabajadores, que tienen como único medio de transporte los buses urbanos.
Profesional en periodismo por la Universidad Sergio Arboleda, con experiencia en medios tradicionales y digitales.