Desde 1921 en el Cementerio Nacional de Arlington en Virginia, Estados Unidos, soldados voluntarios de la Unidad de Infantería más antigua de los Estados Unidos conocida como “The Old Guard” vigila los 7 días, las 24 horas la “tumba del soldado desconocido”, como su nombre lo indica, una tumba de un valiente que nadie conoce pero que representa a cada uno de los soldados americanos muertos en combate que entregaron su vida por el país desde la Primera Guerra Mundial.
Al conocer dicha historia, me pregunto si en Colombia se le rinde tanto respeto a los soldados de tierra, mar y aire que durante más de 200 años han protegido nuestra Patria… La lamentable respuesta es no. Pues aquí, los soldados son villanos y protagonistas de una historia que ha construido la nefasta izquierda donde se han desempeñado como asesinos de sus compatriotas.
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Para empezar, basta no más ver la manera despectiva con la que viejas y nuevas generaciones movidos por “luchas sociales” en redes se dirigen a quienes a diario defienden hasta con su vida a Colombia. Segundo, el poco respeto que tienen muchos colombianos para con nuestros soldados cuando los ven, han demostrado incluso que son capaces de agredirlos sin piedad, recordemos lo que sucedió en las más recientes protestas violentas a lo largo del territorio donde cerca de 300 miembros de la Fuerza Pública resultaron heridos y algunos otros asesinados, como el capitán Jesús Alberto Solano.
Ahora bien, Colombia debería aprender entonces de este tipo de honores que durante generaciones le han hecho los estadounidenses a sus soldados, a sus conciudadanos. Cabe anotar que además de lo ya mencionado, en la “Tumba del Soldado Desconocido” hay un cambio de guardia cada hora del 1 de octubre al 31 de marzo y, cada media hora del 1 de abril al 30 de septiembre ¿No simboliza este acto un máximo de admiración, respeto y legado? Bueno, se me pasaba, además, que los uniformados que allí cumplen su misión voluntaria viven debajo de la Tumba para realizar la limpieza de uniformes y armamento para que todo el tiempo estén a la altura de lo que el lugar y el soldado merece, pues allí “descansa en honor y gloria un soldado estadounidense conocido sólo por Dios”.
Por tanto, este majestuoso lugar representa la victoria, el valor y la paz, valores que para mí, encajan en un soldado sin importar su procedencia ¿Le damos este valor a los héroes de Colombia? No, no lo creo pues muchos de los que habitan en esta hermosa Patria se han dejado llenar de ideas que desdibujan el respeto que esta figura social tiene y además, se han olvidado que, detrás del uniforme también hay un colombiano, un ser humano como usted y yo con sueños, familia, esperanza y temor; pero que sobretodo lo engalana no las medallas en su pecho, sino la convicción de servirle incluso a aquel que lo desprecia y lo ha enterrado a través de la historia no con respeto y grato recuerdo, sino con vilipendio, inquina e ingratitud.
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