Las disidencias de las FARC continúan
siendo constante dolor de cabeza para la seguridad de los colombianos. Luego
del acuerdo de paz, son muchos los guerrilleros que han decidido no someterse a
éste, o retirarse del mismo, después de haberse sometido y unirse a los grupos
disidentes.
Es normal que en un acuerdo de paz aparezcan este tipo de grupos. En general, son personas que no estuvieron de acuerdo con las condiciones, personas que se sintieron excluidas del acuerdo o personas que simplemente prefirieron seguir delinquiendo.
No obstante, el porcentaje de personas que han decidido estar en las disidencias de las FARC es muy grande, y tienden a aumentar. Así lo demuestran los números de la Fundación Ideas para la Paz (FIP) que para finales de 2017, calculó que eran alrededor de 1200 a 1400 criminales los que conformaban las disidencias de las FARC. Sin embargo, según un reportaje hecho por el New York Times para septiembre de 2018, las disidencias de las FARC ya alcanzaban los 2800 delincuentes en sus filas.
Estos datos demuestran que a
medida que pasan los meses, los hombres en las disidencias de las FARC
aumentan, llegando a ser casi el 40% de los hombres que integraban las FARC en
el pasado. Esto, sin contar las personas que, según la FIP, no están dentro de
las disidencias, sino que se han integrado a otros grupos terroristas como el
ELN o el EPL o han decidido formar un nuevo grupo delincuencial, de los cuales
todavía no se hablan.
Ahora bien, el territorio en el que estos delincuentes hacen presencia son bastantes. Según la FIP, en 13 de los 32 departamentos del país, las disidencias de las FARC están presentes: Meta, Guaviare, Vaupés, Vichada, Caquetá, Arauca, Casanare, Antioquia, Putumayo, Guainía, Nariño, Valle del Cauca y Cauca. Lo que demuestra que estas disidencias han cooptado gran parte del territorio colombiano, atemorizando a los ciudadanos y delinquiendo en estas tierras.
De esta manera, el acto
delincuencial más común en las disidencias de las FARC de junio de 2016 a marzo
del 2018, fue el hostigamiento. Seguido por, enfrentamientos con otros grupos
ilegales, desplazamientos forzados, emboscadas y homicidios.
La mayoría de estos actos,
han sido a nombre del frente número 1 de las disidencias de las FARC. Estos
criminales, tienen presencia en Meta, Guaviare, Vaupés, Vichada y Caquetá y han
cometido el 26% de los actos criminales de las disidencias de las FARC. Aunque,
según la FIP, el 22% de las acciones criminales ejercidas por las disidencias
de las FARC, todavía no se ha atribuido a ningún frente.
Sin lugar a dudas, en los
últimos meses se han logrado neutralizar a importantes cabezas de las
disidencias de las FARC. Entre ellos, alias Guacho y alias Cadete. Sin embargo,
las cifras previamente dadas, muestran que se debe seguir actuando con
contundencia frente a estos delincuentes. Las disidencias están aumentando en
hombres y territorio, a medida que pasan los meses. Esto, también ha aumentado
la inseguridad de los colombianos.
En Ante Todo Colombia sabemos de la importancia de lograr
neutralizar a las disidencias de las FARC, para aumentar los niveles de
seguridad de los colombianos.
Por tanto, una de las propuestas para lograr esto es: crear un cuerpo de guardia rural dentro de las Fuerzas Armadas. El personal de la Guardia Rural, debe contar con las capacidades para la prestación del servicio de seguridad rural, pero también con capacidades técnicas para labores agropecuarias básicas, con el fin de asistir a las comunidades del campo. Para la integración de este nuevo cuerpo de seguridad, debe tener prelación la procedencia de zonas rurales del personal que la conformará.