Durante el primer año de mandato del gobierno de Gustavo Petro, el país está inmerso en un panorama complejo. Por ejemplo, los delitos se han incrementado en 2023, según cifras de la Fiscalía General de la Nación, el hurto, el homicidio y delitos de agresión sexual están en aumento afectando gravemente a la sociedad colombiana.
Por otro lado, la situación económica también preocupa pues de los mercados regionales, el colombiano fue el único que cerró a la baja para mediados junio de acuerdo con los datos de Bloomberg.
Irónicamente entre más fracasan las reformas propuestas por el denominado gobierno del cambio, más confianza siente la inversión extranjera en el país. Aunque, la inseguridad jurídica aun mantiene en abstinencia a muchos inversores.
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¿Problema de percepción de la sociedad colombiana?
No, de ninguna manera. Lastimosamente, se ha vuelto común que los gobernantes de turno no reconozcan las problemáticas del país, cuando se deberían plantear soluciones que demuestren liderazgo y contribuyan al progreso del país.
Si bien, la situación regional y global a penas se recuperan de los estragos de la pandemia, esto no es un único factor a tener en cuenta para realizar un balance del primer año de gobierno, ya que en cuatro oportunidades se han presentado marchas civiles para mostrar la desaprobación frente al manejo que se le está dando al país.
La lección para todos los colombianos es la importancia de elegir bien en las urnas, ya que discursos atractivos y promesas, no garantizan el orden y la estabilidad del país.
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