En las últimas semanas en la opinión pública está instalado
un tema bastante controversial y a la vez preocupante: los cultivos de coca en
Colombia. Esto, ha llevado a que dos informes hayan sido noticia en los últimos
dos días. Por un lado, un informe de la ONU en el que se resalta el terreno
perdido del país frente a la producción de cocaína. Por otro lado, un estudio
de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas de EEUU sobre la
estimación de cultivos de coca en el país.
En el primer informe, la ONU alerta a la población
mundial sobre el aumento de muertes a causa de la cocaína. Pero, a renglón
seguido, la ONU dice que en Colombia se produce el 70% de la cocaína producida
en todo el mundo. Situación preocupante, pues esto muestra que el crimen
organizado está logrando cooptar el terreno perdido luego de la firma de los
acuerdos de la Habana en el 2016.
En el segundo informe, Estados Unidos da una buena
noticia, según la oficina de Política Nacional de Control de Drogas, en el 2018
lograron reducirse las hectáreas de cultivo de coca a 208.000. Desde el 2012,
los cultivos de coca no se habían reducido y la tendencia es que año tras año
fueran al alza. Sin embargo, preocupa que del 2012 al 2018, las hectáreas de
cultivos de coca se hayan aumentado en 130,000 (en el 2012 existían 78.000
hectáreas de cultivo de coca).
La situación es crítica, como lo advirtió hace unos
años el ex Ministro de Defensa Juan Carlos Pinzón, Colombia se está inundando
de coca. Se recalca la reducción que se dio en cultivos de coca en el 2018,
pero seguimos lejos de las cifras que alguna vez logramos tener en 2012 y 2013,
y ni hablar de lo lejos que estamos de erradicar este cultivo ilegal que tanto
daño ha causado a los colombianos.
Desde Ante Todo Colombia, consideramos necesaria realizar una revisión a la estrategia estructurada en 2007-2008 y ejecutada desde el 2011 y hasta el 2013. Estrategia que logró una reducción histórica en las hectáreas de cultivos de coca en el país. No podemos seguir permitiendo que un cultivo que se usa para producir droga, siga aumentando en el país. Según la ONU, en 2017 se produjeron 585.000 muertes asociadas al consumo de cocaína, y en Colombia, además, es la principal fuente de financiación de los grupos terroristas que desde hace décadas se han encargado de acabar con la vida de miles de colombianos y de destruir familias.