El piropo se puede describir como una práctica que usualmente se utiliza para manifestar un halago hacia una persona. Según la definición de la Real Academia Española, “el piropo es un dicho breve con que se pondera alguna cualidad de alguien”. Teniendo en cuenta esta definición, el piropo es visto como una conducta positiva. Pero ¿Es una conducta positiva? o ¿Se ha convertido en una conducta irrespetuosa?
A la mayoría de personas nos gusta que resalten alguna de nuestras cualidades, pero cuando lo hace una persona desconocida a la cual no le hemos dado ningún tipo de confianza, puede resultar incómodo. Según Virginia Acuña, experta en sociolingüística y género, “piropo es una excusa para justificar comportamientos en la calle que terminan siendo molestos”. Lo cierto es que muchas personas se refugian bajo el término, piropo, para lanzar frases soeces e irrespetuosas, que tengan por seguro, no gustan.
No queremos que nos digan: “Mamita, rica”, “Venga y le destapo la cañería” o “¿Qué está pasando en el cielo? que los ángeles se están cayendo”, entre muchas otras. Estas frases las escuchamos a diario en la calle y no son agradables y menos si salen de un desconocido. No solo por el hecho de ser mujer, sino porque somos seres humanos que merecemos respeto.
El Observatorio Contra el Acoso Callejero de Chile, encontró que en los casos en donde la mujer -comúnmente- rechazaba el piropo, tan solo el 1% ofrecía disculpas. Por lo cual, se concluyó que quien realiza el piropo no lo hace con intención de halagar o hacer sentir cómoda a la persona que lo recibe. Tal ha sido la molestia de esta conducta, que actualmente existe un movimiento global con sede en Nueva York, llamado “Hollaback” Este movimiento pretende crear conciencia y construir espacios públicos seguros, en donde prime el respeto.
Frente al tema del piropo no existe un consenso, hay personas que lo consideran como una práctica agradable. Otras personas hacen una diferenciación entre piropos, afirmando que hay tanto piropos buenos, como piropos malos. Mientras que para otras personas, piropo es conducta que promueve el acoso ya que, está vulnerando la tranquilidad y el espacio de las personas, específicamente de la mujer, quien es la que generalmente recibe los famosos piropos.
Estas diferencias han generado todo tipo de enfrentamientos, sobretodo en América Latina. Hace unos días lo pudimos constatar en una charla en donde dos actrices se enfrentaron porque una considera al piropo como una flor, mientras que la otra lo cataloga de acoso callejero.
En mi opinión, no me gusta que desconocidos me griten cosas en las calle, no me siento cómoda y preferiría que no lo hicieran. Además, muchos recurren -como se mencionó- a utilizar frases grotescas que hacen sentir molesto a cualquiera. Por ello, el respeto debe ser un principio inquebrantable en todos los aspectos y/o escenarios de nuestra vida. Este principio se debe tener en cuenta también en las canciones que a muchos les gustan, pero que terminan siendo más soeces e irrespetuosas que los piropos callejeros.
Maria Alejandra Ramírez Jaraba. Con disciplina y amor se logran las metas. Internacionalista
Estoy de acuerdo contigo!! Pero también hay que dejar claro que la educación comienza en casa…como estamos educando nuestros hijos? Los estamos formando para que sean el futuro del país? Para que sean padres comprometidos amorosos? Responsables con la educación de sus hijos? De nosotros depende el futuro de las generaciones!!
Buenos días Gloria. Es cierto, la educación es un pilar fundamental para tener sentido de pertenencia sobre nuestros país y actuar en pro del bien común y de la nación.
Por eso, una de las formas para educar es dando ejemplo a los otros. Un abrazo.