Violencia en Colombia, reducir nuestras FFAA no es la mejor opción. Los hechos sucedidos en las últimas horas, demuestran que el país necesita unas FFAA fortalecidas. Y es que, la violencia en Colombia por parte de grupos narcotraficantes, sigue cobrando la vida de miles de compatriotas.
El fin de semana se conoció un tenebroso video grabado en Tibú, Norte de Santander. Allí, las denominadas disidencias de las FARC, entraron a un billar a requisar a quienes se encontraban en el sitio. Lo anterior, sucedió en horas de la noche en medio del municipio y ante la mirada atónita de los habitantes. Después de haber estado allá, recorrieron las inmediaciones del parque central de Tibú e ingresaron a una discoteca. Finalmente, regresaron a su campamento.
Sin duda alguna, el fortalecimiento de los grupos criminales, está asociado al crecimiento de los cultivos ilícitos. En este territorio, los cultivos ilícitos han estado entre las 19,000 y las 21,000 hectáreas. El crecimiento se ha presentado luego del Acuerdo de La Habana, firmado en el 2016. Hoy, Tibú es de los municipios que más tiene en su tierra este tipo de cultivos. Su consecuencia es clara, aumento de la violencia y dominio de la población por parte de los grupos narcotraficantes, tales como las disidencias FARC.
Pero la violencia en Colombia no solo es visible en Tibú. En Antioquia y Nariño se presentaron 2 nuevas masacres en las últimas horas. El primer caso tuvo lugar en Salgar. Allí, 2 personas, aún no identificadas, entre los 16 y 24 años fueron asesinadas. Por su parte, en Tumaco otras 3 personas fueron víctimas de la violencia en Colombia. Entre los asesinados se encuentra el gobernador suplente del resguardo que fue atacado (Jorge Orlando Moreano).
Los números de la violencia en Colombia siguen siendo altos. En los 6 meses y 5 días que llevamos del 2022, se han presentado 50 masacres. Es decir, en el país se registran masacres cada 3 días aproximadamente.
Disminuyendo la violencia en Colombia…
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Sin duda alguna, la presencia de nuestras Fuerzas Armadas juega un papel vital en la disminución de estas cifras. Luego del 2002 se realizaron acciones correctas en la lucha contra el terrorismo. De hecho, los grupos criminales se debilitaron y pasamos de ser considerado un estado fallido a ser la tercera economía de la región.
No obstante, luego del Acuerdo de La Habana, se tomaron decisiones en detrimento de la seguridad. Entre ellas, disminución del pie de fuerza de las FFAA y suspensión indefinida de la aspersión aérea con glifosato para la disminución de cultivos ilícitos.
Hoy vemos las nefastas consecuencias. Por tanto, preocupa que en el aíre del gobierno que se posesiona el próximo 7 de agosto se tengan ideas como reducir el número de efectivos de nuestras FFAA. Igualmente, resulta bastante polémico que se quiera sacar a la policía del Ministerio de Defensa, dejándose de lado la importante coordinación y articulación que se necesita entre ejército y policía, para frenar el crimen transnacional.
Desde Ante Todo Colombia, hacemos un llamado a frenar la violencia en Colombia. Esto se logra con un enfoque social y al mismo tiempo con la necesidad de fortalecer nuestras Fuerzas Armadas y dotarlas de herramientas de última tecnología, que permitan combatir de forma efectiva el crimen.
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