El día de ayer la ministra
de Justicia reveló que la carta enviada por la JEP a Estados Unidos,
solicitando las pruebas que se tienen en contra de Santrich, nunca llegó a su
destino. Desde ese momento, la lluvia de críticas no ha cesado, pues es injustificable
que una carta de alta importancia, se haya “perdido” en el camino.
El trámite de esta carta
comenzó el 26 de noviembre cuando la JEP le pidió al Ministerio de Relaciones
Exteriores enviar una carta rogatoria a la corte distrital de Nueva York, para
pedir las pruebas en contra de Alias Santrich.
Posteriormente, el 29 de
noviembre, se deja constancia de que dicho tribunal tenía plazo de entregar las
pruebas hasta el 28 de enero de 2019. Sin embargo, el 10 de diciembre es el
Ministerio de Justicia es quien envía la carta, pues según el Ministerio de
Relaciones Exteriores, eso no les correspondía a ellos.
El 28 de enero, día en que
vencía el plazo para recibir las pruebas, la JEP informa que no las ha recibido
y que el plazo está vencido. Así entonces, 3 días después, la Ministra de
Justicia Gloria María Borrero, informa que la carta, enviada por la empresa
472, nunca llegó a Estados Unidos. Además,
revela que la carta se encuentra en tránsito en Panamá.
Mejor dicho, le compraron un
tiquete barato al mensajero de 4-72, con escala de 1 mes en Panamá. No tiene
presentación alguna lo que está sucediendo con dicha carta. Por supuesto, el
agua sucia se la echan los unos a los otros. El gobierno dice que fue un error
logístico de 4-72. La oposición, que fue una estrategia del gobierno. Y otro
grupo de personas, que fue una estrategia de Santrich.
Lo cierto es que la carta nunca llegó. Esto, no tiene nada que ver con la culpabilidad de Santrich. La justicia colombiana y norteamericana ha sido clara al decir que este delincuente siguió haciendo negocios con cocaína una vez firmado el acuerdo y por tanto debe pagar. Aunque, lo cierto es que el país se hubiera ahorrado millones de discusiones, si la carta hubiera llegado a tiempo a Estados Unidos.
Desde Ante Todo Colombia, consideramos un despropósito el que una carta, de alta importancia, haya sido enviada hace más de un mes a Estados Unidos y hasta el momento, no haya llegado. No se sabe qué puede estar detrás. Pero lo que sí se sabe, es que la inexperiencia le sigue saliendo cara al gobierno de Iván Duque. Santrich debe ser extraditado, para que pague por sus delitos lo antes posible. Por tanto, exigimos que tanto el gobierno, como 4-72, hagan llegar lo antes posible esa carta a Nueva York. No es justificable una excusa como la que presentó el día de ayer la Ministra de Justicia.