En la noche de ayer en un
acalorado y largo debate, el Senado definió que el próximo lunes, 29 de abril, se
votarán las objeciones a la Jurisdicción Especial para la Paz. Se espera que la
discusión dure todo el día y finalmente se dé la aprobación o no de las
objeciones.
El debate del martes mostró
la polarización que vivimos en Colombia. En primer lugar, Gustavo Petro y
Álvaro Uribe Vélez protagonizaron una escena bochornosa al insultarse en frente
de todos los congresistas. Igualmente, el presidente de la cámara Alejandro
Chacón confrontó al presidente del Senado, Ernesto Macías, por entutelar a la
Cámara de Representantes tras discutir las objeciones antes que el Senado.
La oposición pretendía votar hoy, 24 de abril, las objeciones. Sin embargo, el gobierno esperaba ganar tiempo para reunir las mayorías y lograr la aprobación de las objeciones. Al final del debate se logró un acuerdo que no le da la victoria a ninguna de las partes: El lunes 29 de abril se votarán las objeciones a la JEP y no se podrá tramitar otra ley en el congreso hasta tomar una decisión frente a la JEP.
Con este mapa, la única
posibilidad para que la votación de las objeciones no se realice, sería la falta
de Quorum (asistencia de menos de 53 senadores). Aunque este escenario no es
muy posible, pues quienes están en contra de las objeciones desean realizar una
pronta votación y son 67 senadores. Habría entonces que ver cuántos de estos
están inhabilitados para votar, pero lo más seguro es que no sean más de 14 senadores.
La bancada de gobierno, la
tiene difícil, pues la oposición ya demostró en Cámara que tiene las de ganar. Por
ello, ha comenzado a tramitar acuerdos políticos al interior del Senado para
lograr aprobar, al menos, 2 de las objeciones: la extradición y las personas
ajenas al conflicto que han entrado a la JEP. Resultado que se conocerá el
lunes.
Desde Ante Todo Colombia,
apoyamos que se den los espacios propicios, y necesarios, para que se discutan
cada una de las objeciones. Y esperamos que al final del día lunes, los
beneficiados sean las víctimas de las FARC, en cuanto a justicia, verdad,
reparación y no repetición. Ya que, en últimas, son ellas el centro del acuerdo
de La Habana.