El
día de hoy, martes 25 de abril, alrededor de un millón de colombianos saldrán a
marchar en las distintas ciudades del país. En su mayoría, los manifestantes
serán trabajadores, maestros, estudiantes, transportadores y miembros de las
centrales obreras. A la marcha le han
denominado “Paro Nacional” Por la cantidad de personas y gremios que estarán hoy en las calles
protestando.
Las
razones por las que marcharán son distintas. En primer lugar, muchos de los
manifestantes protestarán en contra del Plan Nacional de Desarrollo (PND) que
será aprobado, o desaprobado, el próximo 7 de mayo. Igualmente, hay un grupo
que saldrá a protestar por las muertes de los líderes sociales. Finalmente,
otro puñado de manifestantes alzará su voz por la falta de inversión social.
Por
un lado, los manifestantes aseguran que el PND aumenta la informalidad laboral
y minimiza los casos de personas que pueden pensionarse. De igual manera,
aseguran que en el PND no se incluyen los recursos necesarios para la educación,
los servicios públicos y el agua potable.
Por otro lado, los transportadores protestan porque no ven rentable para ellos el cambio a la flota automotor que propone el gobierno. Según ellos, con la modernización del parque automotor, la competitividad de los transportadores está dejándose de lado. Por último, los manifestantes marcharán por los asesinatos de líderes sociales, que han aumentado en los últimos años.
Desde
Ante Todo Colombia respetamos la protesta como un derecho de los ciudadanos,
tal y como está consagrado en el artículo 37 de la Constitución Política de
Colombia. Sin embargo, condenamos que se utilicen vías de hecho, que terminan
por afectar a todos los colombianos.
Igualmente,
consideramos que las marchas no deberían afectar las actividades cotidianas de
los colombianos que no participan de las marchas. Y mucho menos, deberían
afectar a nuestros niños, niñas y adolescentes: En Bogotá, el 80% de los
estudiantes de colegios públicos hoy están sin clase.
En
este punto, cabe recordar la investigación de David Jaume “The long run effects
of teacher strikes”, en la que él mismo afirma que el ejemplo de Argentina
confirma que los paros de los profesores, llevan a que sus estudiantes a largo
plazo, se les dificulte más conseguir un trabajo con un salario digno y obtener
logros estudiantiles. Es de recalcar, que los paros de los profesores, también
aumentan el desempleo en el país.
En
síntesis, los colombianos tenemos derecho a protestar, pero también tenemos
derecho a transitar libremente por nuestro territorio, sin que nuestras labores
se vean afectadas por terceros. Y en ningún caso, los niños, niñas y
adolescentes, deberían verse afectados negativamente por estas protestas.