El 6 de noviembre de 1985, el grupo terrorista M-19 se tomó a la fuerza el Palacio de Justicia de Colombia. Ese día, un comando guerrillero asaltó el palacio, tomó alrededor de 300 rehenes y asesinó luego a muchos de ellos, entre esos, a 11 magistrados. Gracias a la labor de las Fuerzas Armadas, 27 horas después se recuperó el control del Palacio de Justicia.
El día en que se recuperó el Palacio de Justicia, los miembros de las Fuerzas Armadas, que participaron en dicho suceso, se devolvieron por la carrera 7ma (emblemática avenida de Bogotá). En su recorrido, miles de colombianos salieron a la calle a aplaudirlos, como reconocimiento a la labor hecha.
Sin embargo, con el paso del tiempo, la historia se
deformó y quienes fueron victimarios comenzaron a aparecer como víctimas. Al punto
que, hoy varios miembros del M-19, como el actual Senador Gustavo Petro, son
figuras públicas, mientras que Militares como el Coronel Plazas Vega y el
General Arias Cabrales, han tenido que responder ante la justicia ¡Irónico!
Es hora de hacer memoria histórica y entender que los verdaderos culpables de lo sucedido aquel 6 de noviembre en el Palacio de Justicia, fueron los terroristas del M-19. Este grupo ilegal estaba a manos del cartel de Medellín, tan es así, que la plata con la que fraguaron el plan de la toma del Palacio de Justicia, fue la del cartel previamente mencionado ¿Qué buscaba el cartel? aparte de generar terror, quería que el M-19 quemara un montón de expedientes que los comprometían con distintos crímenes.
Así entonces, recordemos que ese día el Palacio de
Justicia se incendió y miles de expedientes fueron incinerados. Por tanto,
podría afirmarse que el cartel de Medellín cumplió su objetivo, gracias al
M-19.
La culpa de aquel lamentable día, no es de las Fuerzas
Armadas, es del M-19, que se encargó de secuestrar y posteriormente, asesinar a
decenas de colombianos inocentes. Si a alguien debemos reclamarle y exigirle
justicia, es a los miembros del M-19 y a quienes eran parte del cartel de
Medellín, y si a alguien debemos agradecer es a nuestras Fuerzas Armadas.
A propósito del tema, el día de ayer, la Fiscalía
reveló que en el Palacio de Justicia no se presentaron desapariciones forzadas
¿Quién comenzó a correr este rumor entonces? ¿Estrategia del M-19 y del cartel
de Medellín para voltear la torta y culpar a los militares? Seguramente.
Lo cierto del tema es que, hoy personas inocentes como
el General Arias Cabrales, están tras las rejas, mientras que quienes
perpetuaron tan atroz acto, se encuentran en libertad y son figuras públicas.
No nos dejemos manipular, vayamos a los hechos y entendamos de una vez por
todas que el M-19 no fue más que un grupo terrorista que actuó en alianza con
el Cartel de Medellín, para desestabilizar al país y aterrorizar a los
colombianos ¡No olvidemos!
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