El Covid-19 es un enemigo que amenaza con acabar con muchas vidas, con sumergirnos en una crisis económica, y con poner en riesgo las democracias. Este último punto ha sido relegado a un segundo plano. No obstante, es de vital importancia asegurarnos que la Democracia no se vea en riesgo por ninguna amenaza externa.
Los Gobiernos han tomado medidas como suspender elecciones, dictar decisiones sin tener en cuenta al legislativo y designar autoridades (elegidas por voto popular) arbitrariamente.
Aunque en este tipo de coyunturas es normal que esto pase, los ejemplos en anteriores crisis muestran que las democracias se ven afectadas después de las crisis, pues algunos líderes deciden seguir gobernando con las decisiones que adoptaron, suspendiendo así importantes valores democráticos.
Corea del Sur es un modelo a seguir, pues separó el Covid-19 de lo político, y no suspendieron las elecciones presidenciales, manteniendo así la democracia. Sus habitantes salieron a votar bajo estrictas medidas de distanciamiento social e higiene
¡El mundo debe ser consciente del riesgo bajo el que están nuestras Democracias y se deben tomar las medidas necesarias, para que éstas se mantengan aún con el Covid-19!