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El descaro del ELN

Esta semana se conmemoró el vigésimo aniversario de la masacre de Machuca, perpetuada por la guerrilla del ELN el 19 de octubre de 1998. En dicha masacre 84 personas resultaron asesinadas. Mientras el país recordaba con dolor aquella trágica escena, una de las celular urbanas del ELN “La llamarada”, intentaba colarse en la jurisdicción especial para la paz. Bastante cinismo deben tener los integrantes de esta guerrilla al estar intentando colarse en un proceso de paz que nada tiene que ver con ellos.

Por suerte, la Jurisdicción Especial para la Paz detectó a los colados y no los admitió en su tribunal. El ELN es un grupo terrorista que hace menos de 2 meses secuestró a 9 personas, entre uniformados y civiles, y seguía insistiendo en que tenían voluntad de paz. El ELN es un grupo criminal que está acusado de haber efectuado una masacre en Bolívar, Venezuela, hace menos de un mes, en la que 16 personas fueron asesinadas, y siguen afirmando que quieren la paz para el pueblo colombiano. EL ELN ha demostrado todo, menos voluntad de paz. Estos asesinos no han desperdiciado oportunidad para asesinar, secuestrar y vulnerar los derechos de nuestros compatriotas.

Estos hechos previamente mencionados, son tan solo una pequeña muestra de la “voluntad de paz del ELN”. También, podríamos hablar de los presuntos nexos entre el ELN y la disidencia de las F.A.R.C para perpetuar el atroz asesinato de 3 colombianos en Yarumal, y de muchos otros actos terroristas de estos criminales.

Pero no es necesario seguir enumerando los aberrantes crímenes realizados por el ELN, para entender que la voluntad de paz de esta guerrilla no es real. Esto, queda aún más demostrado con el intento de colarse en la Jurisdicción Especial para la Paz. El ELN busca solamente aprovecharse del estado colombiano, para obtener beneficios sin pagar por los incontables crímenes que han cometido en contra de los colombianos.

Por eso, desde Ante Todo Colombia, pedimos rigurosidad con el ELN. Que la masacre perpetuada hace 20 años, en Machuca, y la “colatón” de estos asesinos en la Jurisdicción Especial para la Paz, sirva para recordar que estos criminales han acabado con la vida de muchos colombianos inocentes. Que sirva para recordar que deben someterse a la justicia y pagar por sus crímenes, antes de obtener cualquier beneficio. Que sirva para recordar que la voluntad de paz que dicen tener, la han demostrado con secuestros, asesinatos y masacres.