Las FARC degollaron a un niño, fue la noticia que estremeció al país cuando corría el año 2002. Luego, envolvieron en papel regalo. Para esa época, Colombia vivía un fallido proceso de paz con el grupo terrorista, acuerdo que fue burlado por las FARC. De hecho, el nefasto hecho ocurrió en la zona de distensión que se les había otorgado.
El abominable acto ocurrió en el municipio de Vista Hermosa, Meta, el cual hacía parte de la entonces denominada “Zona de distensión”. Espacio de 42,000 kilómetros cuadrados entregados a las FARC, en medio de las conversaciones de “paz”. Sumado a Vista Hermosa, la zona de distensión abarcaba otros municipios como La Uribe, Mesetas, La Macarena y San Vicente del Caguán. Durante este tiempo, se presentaron múltiples denuncias de los habitantes en donde afirmaban haber sido víctimas de las FARC.
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La historia del niño que las FARC degollaron
Una de esas víctimas fue un niño de apenas 14 años. Al parecer, las FARC degollaron al niño. No contentos con haber asesinado al niño, decidieron envolverlo en papel regalo, con una bomba amarrada a su cuerpo. El supuesto regalo iba en un carro en el que se había obligado al conductor transportar la bomba, y tenía como destino atentar contra un retén militar en Vista Hermosa. Afortunadamente, el rápido accionar del Ejército Nacional permitió detectar el cadáver bomba y desactivarlo antes de que fuera detonada vía control remoto.
Una carta que iba adjunta al regalo confirmó el objetivo del que pudo ser un atroz cadáver bomba. La mencionada carta amenazaba a los habitantes del Municipio, afirmando que de no abandonar la zona de distensión, seguirían cometiendo acciones terroristas, como el envío de carros bomba. Una amenaza aberrante, pues las propiedades del municipio les pertenecían a ellos por supuesto, no a las FARC.
El hecho fue condenado por distintos países y medios alrededor del mundo. Uno de esos medios fue El País, que en un artículo manifestó su inconformidad hacia la UE por no considerar a las FARC como un grupo terrorista, cuando realizaban este tipo de nefastos atentados.
Las FARC dejaron miles de víctimas en el país, acabaron con la vida de miles de familias y sus atentados terroristas hoy nos siguen doliendo a todos los colombianos. Desafortunadamente, hoy sus máximos cabecillas son congresistas, no han reparado a sus víctimas y se han pasado por la faja la justicia.
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