Aunque a finales de 2019 Cali registró una baja
histórica en las cifras de homicidio, sus estadísticas siguen estando por
encima del promedio nacional. Mientras que la tasa histórica de homicidios en
Colombia es de 25,4 por cada 100,000 habitantes, en Cali dicha tasa es de 47,3
por cada 100.000 habitantes.
Las anteriores cifras han llevado a las autoridades
locales de la ciudad y a los concejales, a buscar distintas alternativas para
que dicha cifra se mantenga a la baja, y en algún momento pueda estar por
debajo de la tasa de homicidios a nivel nacional y de otras ciudades
principales como Medellín, Barranquilla y Bogotá.
En este sentido, resulta muy atractiva la propuesta planteada por el Concejal del Partido Conservador, Fernando Tamayo. Dicho Concejal ha afirmado que la idea de tener una guardia civil, como la que se ha pensado instalar en Cali, es una buena idea. No obstante, todavía no es el momento, pues Cali aun presenta altos niveles de intolerancia y de criminalidad. Con tan solo mirar los insultos y los ataques a los que a diario son sometidos los agentes de tránsito, que son un cuerpo civil, se puede aseverar que la ciudad necesita primero otras medidas.
Por tanto, Considera Tamayo, que en principio lo mejor
es aumentar el pie de fuerza pública en la ciudad, pues para este mes 600
policías serán jubilados y aun no se tiene un plan de contingencia para cubrirlos.
E Igualmente, considera necesaria la presencia de Policía Militar en ciertas
comunas del oriente y de ladera (sitios de alta peligrosidad).
Durante años la seguridad en Cali ha sido un desafío
no superado. Incluso, hasta hace unos años, Cali estaba en la lista de las
ciudades más peligrosas del mundo. Es por eso que debemos prestarle atención a
este tema, y acoger iniciativas razonables de personas con experiencia, como lo
es el Concejal Fernando Tamayo.