En Ante Todo la Mujer, estuvimos acompañados por Andrea Guzmán. Esta científica colombiana ha sido destacada en la revista Forbes por las investigaciones que ha hecho en el campo de la Astronomía. Nos contó de qué manera inició en el mundo científico, cómo ha liderado distintos proyectos y acerca de la iniciativa CHIA.
¿Quién es Andrea Guzmán?
Yo soy estudiante de Doctorado en Astrofísica de la Universidad de Berna, en Suiza. En este momento me encuentro estudiando exoplanetas, que son los planetas que están fuera de nuestro sistema solar. Particularmente estudio las atmósferas, ver de qué están compuestas, qué tipo de elementos hay allí que nos pudieran indicar de pronto la presencia de vida en esos otros mundos. También soy cocreadora de una iniciativa que se llama CHIA, por sus siglas Colombianas Haciendo Investigación en Astrociencias, que pretende reunir todo este colectivo de mujeres que están estudiando el universo. No solo como una plataforma de visibilización del trabajo que ellas realizan, sino también como una forma de inspirar a las nuevas generaciones de astrónomas y astrónomos de nuestro país.
¿Cómo nació el amor por la astronomía?
El amor por la astronomía creo que surge gracias a mi mamá, en cierto sentido, porque yo soy una apasionada de los idiomas. Un día cuando estaba en el colegio, me acuerdo que mi mamá llega a la casa y me dice “oye Andre, hay un programa de un señor que habla inglés, entonces tal vez te pueda interesar” y este programa era Cosmos de Carl Sagan, el divulgador científico por el cual muchos de nosotros estamos metidos en este cuento y pues de ahí ya no me interesó el inglés sino me interesó la astronomía. Y pues casi que paralelamente en mi colegio abren un club donde empiezo también a estudiar algo de esto.
Gracias a la invitación de una colombiana en la NASA en ese momento, fuimos con mis amigos del club de astronomía a conocer parte del NASA Kennedy Space Center y ahí dije “esto es lo que quiero hacer”. Cuando regresé otra vez a Colombia después de esa semana me dieron una beca para estudiar matemáticas y pues pensé que era un muy buen paso para meterme en el mundo de la astronomía. Luego se dieron las cosas, hice la maestría y ahorita estoy en un poquito más de la mitad de mi doctorado.
Así fue como empecé en la astronomía.
¿Por qué estudió matemáticas?
Yo la verdad no me considero matemática, aunque tengo un título de matemática. No lo hice por vocación sino porque sabía que era un paso importante para poder entender lo que iba a hacer si en algún momento podía estudiar astronomía. El punto es que cuando yo me gradué, apenas estaba empezando el pregrado en astronomía en la Universidad de Antioquia y yo tenía 16 años, era muy joven y dije “¿cómo me voy a ir a otra ciudad a empezar de cero?” y bueno, surge esta posibilidad de la beca y la aproveche. Yo vengo de un estrato socioeconómico humilde, entonces el hecho que alguien me estuviera dando una beca para poder estudiar pues dije “hay que aprovecharla” y ¡sufrí! Estudiando matemáticas, pero bueno la saqué y me ha ayudado hasta este momento muchísimo. Entonces yo me considero más astrónoma que matemática, pero definitivamente me dio como unos lentes para mirar el universo desde otra perspectiva que por ejemplo hubiese podido tener desde la física o algo así.
¿Por qué ha decidido investigar sobre los exoplanetas?
Los exoplanetas de un tiempo para acá han sido el boom. La manera en la que yo lo veo es que nosotros estudiamos otros mundos para entender mejor el nuestro. Ya tenemos bastante información – no tanto como quisiéramos – pero realmente tenemos mucha más a comparación de los exoplanetas sobre los objetos del sistema solar, tenemos misiones por ejemplo en Marte, o algunas que han a los planetas más allá de Marte como Júpiter, Saturno, etc., entonces yo creo que estudiar esos otros planetas fuera del nuestro nos puede dar unos indicativos importantes de como el nuestro evolucionó, cómo se formó, si es único, si es usual que se formen sistemas como el de nosotros, si los planetas rocosos como lo es el planeta tierra existen alrededor de estrellas similares al sol. Entonces, yo creo que es una manera de estudiar nuestro propio sistema, pero de una manera más general y que nos puede dar más indicios de todo el universo.
¿Cómo nace su movimiento colombianas haciendo investigación en Astrociencias?
Más que un movimiento es una iniciativa, es un colectivo. Y surge precisamente un día, en esta misma oficina, en este mismo lugar hablando con una compañera y nos hemos preguntado “bueno realmente nos conocemos solo como 3 o 4 que hacemos investigación en el área de astronomía” – o por lo menos que yo conociera – y por lo general los referentes que uno tiene en esas áreas al menos en los noticieros, en los periódicos, en entrevistas siempre son hombres, son hombres astrónomos. Entonces llega la pregunta ¿será que realmente no hay ninguna astrónoma más? De pronto más de la una o dos que siempre nombran y todos los hombres que nombran. Entonces nos hemos puesto en esa tarea de ir voz a voz “bueno, ¿tú a quien conoces? ¿en qué instituto? ¿haciendo que investigación?” y nos dimos cuenta que hasta el momento hemos recogido más de 80 de ellas. Hicimos un censo hace unos días que estábamos escribiendo un artículo sobre “el estatus de la mujer astrónoma en Colombia” y ya vamos en 80 que están en formación y profesionales.
Entonces realmente no es un problema que no haya astrónomas, sino que es un problema de visibilización de su trabajo. Creo que darles plataformas como las que hemos creado de pronto en CHIA, en las redes sociales, o en hacer alianzas con el planetario, con los periódicos, con otros colegas e incluso las universidades, pues es también generar roles y mentoras para las nuevas generaciones de científicos y científicas de nuestro país.
Esa ha sido un poco la misión, la visión de CHIA y hasta el momento nos ha ido muy bien, hemos hecho cosas interesantes y también porque nos hemos vuelto un grupo de apoyo entre nosotras mismas, para compartir posibilidades de hacer colaboraciones, de clases de apoyo de doctorados y post doctorado. Entonces ha sido una experiencia muy interesante y enriquecedora.
Yo siempre he dicho que uno no se convierte en lo que no ve, y me parece muy importante que en especial en un país como Colombia, tanto los niños, niñas y jóvenes puedan ver que hay personas como ellos, que vienen de condiciones muy similares, que han podido llegar a posiciones académicas importantes, que están haciendo investigación que puede generar cierto tipo de impacto en la sociedad. Y eso es un mensaje muy fuerte e importante.
Un mensaje para los jóvenes de nuestro país
El mensaje sería que no desfallezcan. El camino para llegar a la ciencia no es fácil, pero se puede. Existen oportunidades, pero tal vez a veces también están muy escondidas, por ejemplo, becas o posiciones, pero eso es precisamente – de lo que yo estoy segura – que muchos científicos en el país estamos haciendo, abriendo esos caminos, abriendo esas puertas en el exterior. Ahorita con las redes sociales podemos mostrar un poco más de esa gama de oportunidades y son mucho más accesibles.
Y lo otro, tienen que ser un poco más activos, más proactivos social y políticamente porque si realmente queremos ver un cambio – al menos en la ciencia en general en nuestro país – tiene que haber inversión, y esa inversión no va a llegar sino del Gobierno Nacional, entonces en ese sentido tenemos que mostrar cuál es la importancia de invertir en ciencia, invertir en programas de educación en nuestro país, laboratorios, instituciones y esa es una de las cosas en las que por lo menos yo estoy interesada para seguir haciendo en el futuro.